Perú: “En estos momentos, el flete de las cebollas costaría más que el producto en sí”

“Concretamente, la cebolla de exportación de la variedad amarilla se introdujo en el año 1996 por importadores de Estados Unidos que buscaban un país que les abasteciera en contraestación, cuando no tenían cosecha local”, señala Luis Torres, gerente de Shuman Perú. “Y desde entonces el incremento de los envíos ha ido al alza”.

“Solo 12 años después de aquellas primeras pruebas en el cultivo de la cebolla y de los primeros contenedores enviados al mercado estadounidense, en 2008 las exportaciones de cebolla de Perú ascendieron a 2.100 contenedores, y en 2021 cerramos con 7.650”. Este crecimiento ha estado impulsado por varios factores, explica Luis.

“La ventana de comercialización se ha ampliado bastante gracias a la introducción de semillas que nos han permitido adelantar el inicio de la cosecha y prolongar su final. Como datos, en el 2008 las primeras exportaciones empezaban en la semana 32 y los últimos contenedores acababan en la semana 51, mientras que en 2021 los primeros contenedores de cebollas salieron la semana 27 y los últimos, la semana 12. En solo 13 años pasamos de una campaña de 19 semanas a 37 semanas continuas de exportación de cebollas”.

“Otro factor está relacionado con el calibre”, comparte Luis. “Estados Unidos es un mercado que demanda calibres de cebollas grandes, jumbo y colosal; y en el inicio de las exportaciones, las cebollas de calibres menores se tenían que botar, ya que en Perú solo se consume la cebolla rosada. Solo unos 10 años después de empezar el negocio de las exportaciones a Estado Unidos hubo algunos exportadores que empezaron a exportar a Europa precisamente esos calibres medianos. En 2008 se enviaron a España 30 contendedores desde Perú, y en 2021 ya habían crecido a 1.461”.

“Asimismo, se encontró también mercado para las cebollas de calibre pequeño, que actualmente enviamos a Centroamérica y a Haití. Este país en concreto ha dado un gran salto en las importaciones de cebolla de Perú: en 2019 no había aún envíos y en 2021 llegaron al país 94 contenedores, cada uno de ellos de 27 toneladas de cebollas”.

“Actualmente las exportaciones siguen creciendo y estamos experimentando con nuevos mercados. De hecho, Shuman Perú ha sido la primera empresa peruana que ha enviado cebollas a Canadá, Portugal y Bélgica”.

“En 2021 enviamos los primeros 6 contenedores de cebollas peruanas a Canadá; en 2020 enviamos el primero a Portugal y en 2021 ya enviamos 6; y también iniciamos los envíos a Bélgica hace dos años. Estamos muy emocionados porque, aunque por ahora los números son pequeños, viendo la tendencia que han seguido las importaciones desde España se podría producir un gran salto en esos mercados”, señala Luis Torres.

Shuman Perú“Shuman Perú se constituyó en 2006. Somos proveedores de la empresa americana Shuman Farms, y le suministramos tanto con nuestra producción como organizándole el abastecimiento de otros productores en Perú”.

“En un principio comenzamos a trabajar con Shuman Farms solo organizando la oferta y canalizando las ventas a Estados Unidos, pero con el pasar de los años y con el aumento de sus ventas dimos un paso más y hace 5 años decidimos producir también nosotros”.

“Como referencia, cuando Shuman Farms empezó a importar cebolla de Perú en el año 98 adquirió 7 contenedores, y el año pasado hemos cerrado con 1.652 contenedores. En este momento Shuman Farms, nuestro cliente en Estados Unidos, es, de hecho, el principal importador de cebolla de Perú”, destaca Luis. “De esos contenedores, 329 provinieron de nuestras siembras, en las cuales cosechamos un total de 450 contenedores”.

“Nuestra planta de proceso y selección está ubicada en Ica, pero tenemos campos de cultivos desde Olmos, en el norte de Perú, hasta Arequipa, en el sur, para garantizar el suministro de cebollas en nuestra planta todas las semanas de la temporada. Y dado el crecimiento que podría darse en los nuevos mercados a los que hemos llegado, probablemente en los próximos años podríamos incrementar nuestras áreas de producción”.

La logística, el mayor reto actualEl crecimiento ha sido exponencial, como demuestran los números, pero en estos años de expansión, la industria de la cebolla de exportación en Perú también ha enfrentado sus propios retos.

“El país ha tenido la fuerte pérdida del mercado de Panamá. Era un mercado muy interesante por diversos motivos: estábamos a tan solo 4 días en barco y demandaban cebollas de pequeño calibre, lo que ayudaba a que pudiéramos vender toda la producción del país. Pero hace unos 3 años su mercado se cerró por unos requisitos fitosanitarios en la exportación relativos a la certificación de los campos, y ahora lo provee Holanda, el mayor exportador mundial de cebolla”.

“Actualmente tenemos, además, un problema asociado a la logística. Los fletes marítimos se han duplicado con respecto al año pasado; de hecho, en estos momentos, el transporte costaría más que el producto en sí. Hay que recordar que la cebolla es un cultivo de bajo precio unitario. Eso va a ser una limitación muy fuerte esta temporada”.

“Por ahora las siembras de cebolla ya empezaron. Por lo que veo, van al ritmo al que siempre han estado, pero en el sector todos hemos empezado con incertidumbre esperando que de acá a junio el tema de los fletes se normalice”.

“Sin embargo, Perú tiene una ventaja importante en la producción de cebollas de cara a los programas de exportación: las siembras se realizan mayoritariamente en la costa del país, de manera que el clima hace que la producción sea muy estable. Eso, para un comprador, es ciertamente interesante”, subraya el gerente.