Europa: Impugnan la retirada del mancozeb para patata
El 1 de julio, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) celebrará una audiencia crucial en el asunto C 262/23 P, en la que se impugna la decisión de la Comisión Europea de 2020 de retirar el mancozeb para la patata.

Esta sentencia podría abrir la puerta a la reaprobación del mancozeb y su puesta a disposición de los agricultores europeos. El caso será seguido de cerca por agricultores y sus cooperativas en toda Europa.
La impugnación legal se centra en que la decisión de la Comisión Europea no tuvo en cuenta las directrices actualizadas de clasificación emitidas por la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA), lo que podría afectar significativamente a la evaluación de la clasificación del mancozeb como tóxico para la reproducción. La retirada se basó en criterios obsoletos que no reflejan el conocimiento científico actual.
Esta audiencia se produce en medio de un agravamiento de la crisis del tizón tardío en toda la UE. Las infecciones aparecen ahora a principios de la temporada, incluso antes de que finalice la siembra en algunas regiones, con nuevas y agresivas cepas de patógenos que superan tanto los esfuerzos de mejoramiento de cultivos como las soluciones fungicidas disponibles.
Mancozeb, un fungicida rentable y multisitio con un valor demostrado en el manejo de la resistencia, ha sido durante mucho tiempo un pilar del manejo integrado de plagas (MIP) en la producción europea de patata. Su retirada en 2020 dejó a muchos productores sin alternativas viables en un momento en que la volatilidad climática y la evolución de los patógenos están intensificando la presión de las enfermedades. Los fungicidas existentes, que son principalmente productos de un solo sitio, están perdiendo eficacia, y varias sustancias activas están bajo un renovado escrutinio regulatorio.
El sector ha continuado invirtiendo en soluciones sostenibles, como el Plan de Acción 2024 lanzado por el Copa y la Cogeca para fortalecer el MIP, acelerar el uso de variedades resistentes y mejorar la coordinación de la cadena de valor. A pesar de esto, las condiciones del campo siguen siendo cada vez más preocupantes.
Por lo tanto, esta audiencia es más que una mera formalidad legal. Se trata de una prueba crucial para la capacidad de la UE de fundamentar sus decisiones regulatorias en directrices científicas actualizadas y en las necesidades agrícolas reales. El Copa y la Cogeca instan a las instituciones de la UE a garantizar que los agricultores mantengan el acceso a herramientas eficaces, manteniendo al mismo tiempo los altos estándares de la Unión en materia de salud, seguridad y sostenibilidad.
Fuente: revistamercados.com