Argentina: La producción de papa es viable en el centro y sudeste de Córdoba

Sattler, con relación a los movimientos del cultivo de la papa, indicó: “Los cinturones verdes de Córdoba eran grandes productores de papa, pero estos cinturones a medida que la ciudad va creciendo van dejando lugar a nuevos emprendimientos inmobiliarios y se fue abandonando el cultivo de papa”.

Describió que “la papa es un cultivo extensivo-intensivo, porque se hace a grandes superficies, con un costo importante, con alta tecnología, y con rendimientos. Se invirtieron procesos de fecha de siembra: enero-febrero-marzo, y la fecha normal sería julio-agosto. Hay una tercera que se hace en las Traslasierra que es en noviembre y Villa María podría entrar en esa fecha, imitando la producción de Balcarce”.

Al referirse a las variedades probables a utilizar en la zona centro de Córdoba Sattler indicó: “Spunta sigue siendo la variedad más importante de Argentina para lo que es papa de campo. Hoy vamos hacia nuevas variedades, variedades de ciclo más cortos y que tengan mejores comportamientos con altas temperaturas, con rendimientos variables de acuerdo a la época. Tenemos que estar arriba de los 30 mil kilos por hectárea, ya que si no llegamos vamos a tener problemas de costos”. Respecto al uso de nuevas variedades señaló que hay algunas papas experimentales que posibilitarían un mejor rendimiento zonal.

Con relación al desarrollo del cultivo indicó que “necesita 500 milímetros de riego por ciclo de papa. En un sistema de riego el costo está en el orden de los 70 centavos de dólar un propietario de campo que tenga equipo lo amortiza rápido, aunque si alquilás te van a cobrar 1,20 dólar el milímetro de riego”, apuntó el experto.

En general en los campos con destino a papa (con riego) se está pagando alrededor de 500 dólares por hectárea y ya comienza a disputarse tierras con el maní.

En cuanto a lo sanitario, Sattler indicó que “en Villa María vamos a tener inconvenientes con las mismas enfermedades que tenemos en otros lados: alternaría y fitóftora son las principales, pulgones y trips”.

Al definir qué rol juega en el negocio de un horticultor puntualizó que “la papa es un elemento más del mercado frutihortícola, pero se trata de hortaliza pesada. La diferencia es que le da volumen al productor que hoy hace verduras de hoja y cambia la escala de trabajo y se permite salir del cinturón verde villamariense y vincularse con otros mercados”.

Fue enfático ante una pregunta del periodista al decir: “La papa es viable en Villa María en dos siembras y si se adapta toda la tecnología”.

Que variedades son más viables

A su turno la ingeniera María Ferraris y la licenciada en genética Mariana Cativeli, integrantes del INTA le dijeron que “esta jornada se realizó en el marco del Proyecto Local que tiene que ver con la diversificación de la producción hortícola. Estamos con productores y técnicos para mostrarles como es el avance de la papa”. Agregaron que “muchos productores han adoptado a la papa como producción, después la han dejado de hacer y ahora lo que queremos es reflotar la idea. No es un cultivo complejo, aunque el tema del suelo puede ser la complejidad, pero en general hay buenas condiciones para desarrollarlo”.

Una de las debilidades es que “hay una variedad de papa dominante y no es muy bueno. Es una variedad que se hace porque tiene buena adaptación a la zona. Hay herramientas muy interesantes para la cosecha. Los lugares donde está más desarrollado el cultivo tienen cosecha mecanizada. La dificultad es el tizón y dificultades de fertilización por ser tubérculo”. Las técnicas destacaron que Spunta, una variedad holandesa muy dominante en Argentina en el consumo fresco es muy susceptible a enfermedades, aunque pica en punta en rendimientos.

Otras variedades que se vieron en la jornada fueron Newen INTA, muy buena para el consumo fresco y frita en bastones, con buen comportamiento frente al hongo que provoca el Tizón tardío; Calén INTA con resistencia al Virus del enrrollamiento de la hoja, e interesante para la obtención de papines (no confundir con papines andinos), papas fritas en bastones,papa hervida o en puré y la cuarta variedad probada fue Frital INTA, una vieja variedad de casi 30 años muy buena para papines o papas fritas en bastones con moderada resistencia a Tizón tardío y hongos de suelo.

“Incluimos tres variedades de INTA Balcarce del Programa ProPapa, que son Nehuen INTA, Frital INTA y Calen INTA, y a su vez incluimos esta variedad que domina el mercado que es Spunta”, dijo la ingeniera Ferraris y añadió: “Calen se comporta muy similar en lo aéreo a Spunta. Después hay dos variedades que desde el punto de vista aéreo están bien pero no sabemos cómo está el tubérculo. Fue una siembra tardía, sembramos el 30 de agosto. La papa tiene al menos 120 días, estaríamos cumpliendo el ciclo a fines de diciembre”.

En el lote, por su tamaño Spunta sobresalió notablemente frente a las otras 3 variedades que son de tamaño más pequeño y tienen forma oval/alargada.