España: La papa gana terreno en Gran Canaria
El tubérculo ha dado la vuelta a una tendencia declinante. Recupera hectáreas y mejora los rendimientos por hectárea, en una lucha permanente por el agua, por la sanidad y por la rentabilidad
Gran Canaria cultiva 1.200 hectáreas de papa y produce anualmente unos 49 millones de kilos de este tubérculo, un alimento presente en todos los hogares y prácticamente una seña de identidad de la isla. El 60% de la papa consumida en la isla ha sido cultivada por productores locales.
Los técnicos del Servicio de Extensión Agraria del Cabildo insular, junto a unos agricultores comprometidos con el cultivo, han conseguido que en los últimos años la papa haya recuperado superficie y rendimientos, siempre con la mirada puesta en superar los grandes retos que tiene planteados. Entre ellos, la sanidad, el acceso al agua y la rentabilidad.
La Consejería de Sector Primario, Soberanía Alimentaria y Seguridad Hídrica del Cabildo de Gran Canaria incluye entre los objetivos de su Plan Estratégico para el Sector Primario la valorización del producto y la contribución a la mejora de su calidad.
Ensayos
Dentro de ese programa destacan por su importancia los ensayos de variedades. En el último realizado, cuyas consecuencias ya se han compartido con los agricultores locales, se plantaron y analizaron 22 variedades de papas, entre ellas varias de las más rentables de ediciones anteriores o de mayor presencia en el mercado insular, junto a otras nuevas.
Del análisis de distintos parámetros se obtienen datos muy valiosos para los agricultores centrados en la productividad, aptitud organoléptica y resistencia a sequías, plagas o enfermedades.
La polilla de la papa
Junto al ensayo de rendimientos, se lleva a cabo una activa labor de control de las plagas y especialmente, contra la polilla guatemalteca de la papa (Tecia solanivora). Para el control de este insecto, la Consejería de Sector Primario se ocupa del análisis y seguimiento de sus poblaciones, asesora en la forma preventiva de cultivar y recolectar, y otorga una ayuda (20 céntimos el kilo) para evitar al productor el gasto que le supone la destrucción de los tubérculos afectados.
La efectividad de las medidas aplicadas ya se nota en el campo, pues del medio millón de euros consignado en 2024 para subvencionar la destrucción en los Ecoparques del producto afectado, solo fue necesario gastar 378.000 euros: la cantidad de producto dañado era menor que en el año anterior.
“Tenemos un programa de control de plagas y enfermedades muy ambicioso. El cabildo destina más de un millón de euros al año a combatir la plaga de la polilla guatemalteca. Recogemos el cultivo afectado para que la plaga no se extienda, ayudamos en la rotación de cultivos, subvencionamos la instalación de trampas…”, detalla Armando Rodríguez, responsable del Servicio de Extensión Agraria.
De la mano del agricultor
La administración trabaja en contacto permanente con los agricultores, tanto mediante el asesoramiento ofrecido en su explotación como por medio de la labor desarrollada en laboratorios de análisis de suelo, fitopatológicos y de agua. El técnico destaca la importancia de los ensayos de variedades realizados por su departamento y apunta que la mayoría de las papas cultivadas en Gran Canaria son extratempranas y tempranas, aunque también hay producción de papas de media estación y tardías.
La labor conjunta de técnicos y agricultores permite afrontar el gran reto del agua. “El cultivo tiene ese freno, pero se va mecanizando, sigue creciendo, y cada vez son más los jóvenes -y no tan jóvenes- que se incorporan; se sienten atraídos por un sector competitivo y por medidas como la línea de ayudas abierta por el Cabildo para la recuperación de tierras abandonadas”, recalca Armando Rodríguez.
Consumo de la papa
Según el último informe de consumo alimentario en España, Canarias es la cuarta comunidad del país que más papas consume, con una media de 31,75 kilos por persona al año, solo por detrás de Galicia (33,27 kilos), Asturias (32,73 kilos) e Islas Baleares (32,13 kilos)
De lo que se infiere que en Gran Canaria se produce aproximadamente el 62 % del total de papas consumidas, porcentaje superior al recomendado por la FAO para la soberanía alimentaria de los pueblos (40%).
El Municipio de Teror es el mayor productor de la isla con 185 hectáreas, seguido de Las Palmas de Gran Canaria con 170 hectáreas y la Vega de San Mateo con 130.
Según datos del ISTAC (Instituto Canario de Estadística) en 2023 la producción de papas en la Isla de Gran Canaria, ascendió a 49.238.100 Kg, lo que supone el 62% de las papas consumidas en la isla y el 44,28% de las consumidas en el Archipiélago Canario.
“Existe posibilidad y medios para aumentar dicha superficie y producción. Dicho cultivo es rentable, pero tiene graves problemas de autofinanciación, problemas de aguas y suelo mecanizable para aumentar la producción y mayor valorización de la producción local por parte de las grandes superficies comercializadoras, que son las distribuidoras del producto final”, apunta Rodríguez.
El problema principal son los bajos precios que percibe el agricultor, con lo que muchas veces, una vez cubiertos los costes de producción, depende de las subvenciones a la producción y a la comercialización para obtener un beneficio.
En la actualidad los rendimientos se encuentran entre los 28.000 y los 60.000 kilos por hectárea según época, zona, suelo, variedad, agricultor y año meteorológico.
Fuente: revistacampo.es
